Zona del cuerpo diagnosticada:
Sangre
Descripción:
Análisis de sangre realizado a mujeres embarazadas, con el fin de detectar gestaciones con riesgo de anomalías congénitas.
Información:
La prueba de triple screening o rastreo es una prueba no invasiva mediante la cual se puede detectar el grado de probabilidad de que el feto sufra ciertas anomalías de tipo congénito. Las más comunes son el síndrome de Down (trisomía 21) y las malformaciones del tubo neural, como la espina bífida.
El estudio se basa en analizar y cuantificar los valores de tres sustancias producidas por el feto: la alfafetoproteina (AFP), el estriol y la gonadotrofina coriónica humana (HCG).
¿Cómo se valoran los resultados?:
Se utiliza una fórmula matemática que tiene en cuenta los niveles de las tres sustancias y las pondera en función de la edad y el peso de la madre, así como la eventual existencia de diabetes.
El valor final, después de compararlo con los valores de referencia y con el umbral a partir del cual se considera que se entra en una franja de mayor riesgo, proporciona el grado de probabilidad de malformaciones:
Valores de AFP o de estriol bajos y de HCG elevados, indican alto riesgo de que el feto sea portados de síndrome de Down.
Valores de AFP o de HCG elevados, indican la presencia de un defecto del tubo neural.
Cuando el triple screening da resultados significativos, se procederá a realizar exámenes más precisos para confirmarlo, el más común de los cuales es la amniocentesis.
¿Cómo se realiza la prueba?
El día de la prueba, el médico registrará los siguientes datos de la embarazada: edad, peso, fecha de la última menstruación y fecha probable del parto. La paciente deberá estar entre la 15ª y la 20ª semana de gestación.
Se procederá a realizar una extracción de sangre venosa, generalmente en el antebrazo. La muestra será llevada a un laboratorio de análisis y, en condiciones normales, los resultados se podrán tener en una o dos semanas.
¿Existen riesgos?
Se trata de una simple extracción de sangre, totalmente libre de riesgos para la madre y el feto.
Conviene ejercer presión en la zona de punción una vez finalizada la extracción para prevenir la formación de un hematoma.